La pensión cuenta con una excelente ubicación cerca de supermercados y bares locales.

La habitación era bastante más pequeña de lo que esperaba y el ventilador apenas movía aire. Además, el ruido de las cañerías era un problema constante y el soporte de la ducha estaba roto, lo que hacía que las duchas fueran incómodas. En cuanto al servicio, la recepción fue un poco apresurada al entregarnos las llaves, lo que hizo la llegada un poco estresante.

mi experiencia en valencia fue increíble, y la pensión superó mis expectativas. tenían una cama cómoda que me permitió descansar bien, y la limpieza del lugar era admirable. además, la cercanía con bares y supermercados hizo todo más fácil para disfrutar el fin de semana.

el baño era bastante pequeño.

La limpieza diaria del lugar fue excepcional y el personal fue siempre amable y servicial.

Tuve problemas con el soporte de la ducha, que estaba roto, lo que dificultó un poco las duchas.

Ojito con esta reseña…

La experiencia fue decepcionante. La habitación tenía un olor extraño y descubrimos una cucaracha. El baño estaba sucio y el soporte de la ducha roto. Aunque el servicio fue amable, el mal estado general del lugar me dejó insatisfecha. Hay opciones mejor valoradas por el mismo precio en la zona.

disfruta del mercado y los parques en valencia

Me encantó la cercanía al Mercado Central, donde cada paseo se convierte en una fiesta de sabores y colores, así como el parque Gulliver, que es perfecto para relajarse después de caminar y explorar la ciudad. un lugar ideal para disfrutar al máximo de un fin de semana en Valencia.

La ubicación es conveniente para

explorar la ciudad y hay autobuses cerca que te llevan al centro en pocos minutos. La pandilla de empleados es extraordinariamente amable y te orienta sobre qué hacer. Sin embargo, el ruido en los pasillos puede ser incomodo por la noche.

una excelente vista desde la habitación

amabilidad del personal, limpieza diaria

falta de a/c

La habitación estuvo bastante justa, aunque las camas eran cómodas. El problema fue que la foto no reflejaba la realidad, era más pequeña de lo que esperaba. La pensión queda cerca de la estación de tren y hay muchas opciones de bares y supermercados cerca, lo que facilita conseguir lo que necesitas. Aunque al llegar, hubo un malentendido con la reserva, rápidamente el anfitrión se encargó de arreglarlo y eso se agradece. Sin embargo, el baño tenía un soporte de ducha roto, lo que hizo que cada ducha fuera incómoda. Además, el ruido de la cañería era bastante molesto. Me gustó la amabilidad del anfitrión al esperarnos, a pesar de que llegamos tarde porque retrasamos el tren. En general, creo que el lugar tiene potencial, pero necesita algunas mejoras.

He quedado encantado con la variedad gastronómica en los alrededores. El Restaurante Las Eras, un poquito a la vuelta, ofrece unos platos que te hacen salivar y el Wok Beijing, con su fusión de sabores asiáticos, es una joya que no te puedes perder. Además, la limpieza y la comodidad de la habitación me dejaron a gusto.

La verdad, nos sentimos un poco engañados al pagar más por una habitación con baño privado, pero acabamos usando el compartido porque no había agua caliente, solo un chorro tibio. Se escuchaba a la peña en los pasillos y en la ducha. La habitación necesitaba más cariño en la limpieza, pero aún así, todo brillaba.

El personal, la limpieza, la comodidad, la ubicación – ¡todo genial!

La habitación era un poco más pequeña de lo que esperaba, pero el ventilador fue un salvavidas en el calor. Sin duda volvería por la buena relación calidad-precio.

El ambiente era tranquilo, con limpieza diaria. Pero el baño era bastante pequeño y el ventilador no enfriaba suficiente. Buen acceso a supermercados y restaurantes cercanos, lo que facilita la estancia.